1. El debate de los modos de producción en los estudios
africanos (Bill Freund)
En la producción académica africana (o
referida África) el tema de los modos de producción fue eminente en los 70’s.
Sin embargo, no se cumplieron las predicciones de Harold Wolpe y este interés en los modos de producción
decayó en los 80’s.
El debate acerca de los modos de
producción con la pérdida de hegemonía de los partidos comunistas soviéticos.
Referido a Africa, Catherine Coquery Vidrovicth, basándose en la discusión
del CERM acerca del modo de producción asiático, entendió la posibilidad de
existencia de un modo de producción africano (la autora proponía que, especialmente en Africa occidental, el modo de
producción dependía de una clase dominante que se basaba en el control del
comercio a larga distancia)
Suret-Canale entendió, por
contraste a Africa como una zona donde primaba una forma modificada de modo de
producción asiático.
Retener
desarrollos
Terray, por su parte
critica el énfasis de Coquery Vidrovicth en la circulación.
“…para los autores más relevantes la
aplicación de la noción de modo de producción no está realmente destinada a
explicar demasiado acerca de los productores africanos, sobre cuya historia
continuamos sabiendo muy poco, sino contribuir a un argumento clásico que había
ocupado largamente a los historiadores burgueses: los orígenes del Estado
africano”
Los autores involucrados en este debate
africano rechazaban tanto la generalización abusiva de la teoría de la dependencia frankiana (basada en un Baran que había sido cercano a los teóricos críticos en
Alemania)…
Retener
…como la teoría burguesa de la modernización.
Basados en la idea de
conservación/disolución de Bettelheim, estos autores intentaron comprender
teóricamente por qué estos modos no capitalistas continuaban existiendo (en cambio, para Frank las zonas no
capitalistas no existían…)
“Es verdad que un buen argumento lógico
puede ser hecho, como lo realiza Samir Amin,
para concebir un fuerte elemento común en todas las sociedades clasistas
fuera del capitalismo….Sin embargo, si este es el caso, uno tiene que
preguntarse si llegamos demasiado lejos con una caracterización tan amplia. En
verdad, cada sociedad en cualquier época parece tener rasgos particulares que
necesitamos comprender si buscamos entender su desarrollo, y estos rasgos son
solo revelados vagamente si insistimos siempre en referirnos a una pequeña
lista de categoría universales”
Esta
es una forma de criticar a Amin, como también a Cueva
“Como Foster
Carter ha enfatizado en su importante crítica de Rey, no es claro como un modo
de producción coherente continúa intersectando con el capitalismo industrial
una vez este último se ha hecho realmente sentir…Gavin
Kitching ha notado que en la Kenya rural ya no es posible distinguir cualquier
modo de producción individual coherente, aún si mucha de la actividad económica
difícilmente puede ser explicada en términos capitalistas. Johan Pottier, en un artículo reciente,
gráficamente describe como la conservación de la vida rural una generación antes
en la Rodesia del norte, ha supuesto su disolución en Zambia, a pesar, uno
sospecha, de la voluntad de tanto el capital como del estado. Una vez el modo de producción ya no es
capaz de procesar socialmente su reproducción de una manera distintiva, ¿es
realmente significativo discutir las relaciones sociales en términos de una
articulación entre distintas esferas circulando autónomamente en torno a sus
propias estrellas?”
Es
una buena pregunta. Wolpe la responde con su distinción entre modo de
producción restringido (unidad de producción no capaz de autorreproducirse en
su situación actual) y modo de producción extendido (unidad de producción capaz
de reproducción ampliada en su situación actual). Nosotros incorporamos esta
idea con la reapropiación de la tesis de las formas de explotación de Banaji. A
partir de esto emergen las siguientes preguntas: a) ¿Qué implica la
reproducción simple como tercera categoría, intermedia entre la no-reproducción
y la reproducción ampliada? (¿es históricamente posible?); b) ¿realmente
podemos tratar con un solo concepto (“formas de explotación capitalistas”)
realidades sólo articuladas al nivel de la circulación, realidades subsumidas
formalmente de manera plena al capital (tipo pequeños productores de Languedoc
de Vilar) y realidades capaces de autorreproducción y vinculadas a través de la
producción (como pudo ser con el esclavismo sureño yanqui)?
“Finalmente, el
modo doméstico de producción (de parentesco, etc) ha mostrado ser un recipiente
con fugas. Como ya ha sido sugerido, parece poco claro cómo puede permanecer un
modo de producción una vez las clases dominantes precapitalistas, dejemos fuera
el capital y sus varias formas, deviene históricamente relevante…es difícil
disociar su “modo” (de Meillasoux) con
los modos campesinos de producción o chayanovianos…”
Es
una buena crítica al modo doméstico de producción. Nuestra propuesta acerca de
las formas de explotación capitalistas puede subsanar el problema porque: a) no
cae en el mito chayanoviano de la autorreproducción independiente; b) explica esta
forma como una forma capitalista…
“Si uno pudiera resumir, la dificultad
es que mientras modos de producción particulares pueden ser definidos con una
elegancia y coherencia interna que provee una considerable satisfacción
intelectual (Hindess y Hirst), los modos, una vez transformados en modelos, se
prueban como incoherentes y rígidos en su aplicación. Este argumento, si es
extremado lo suficiente, sugeriría que ellos fallan en cumplir el criterio
marxista más importante, cuando dejan de tener cualquier significado al momento
de hacer una valoración de ellos partir del materialismo histórico”
Es
una buena cita metodológica ésta. Nuestra propuesta precisamente intenta
solucionar esta cuestión, que esencialmente refiere la vinculación entre
historia y teoría, entre el concepto-totalidad y sus momentos de concreción
(categorías intermedias de Meiksins Wood)
“Como Cohen,
entre otros, ha notado, Marx ni siquiera utilizo las palabras “modo de
producción” de manera enteramente consistente. Las discusiones de Marx del
desarrollo histórico son ricas en una imaginería poética y orgánica, bastante
dañina para lo que normalmente pasa por análisis estructural”
Y es
verdad que Marx trata el concepto de modo de producción de manera laxa. Pero
esto no quita que haya sentado las bases de un proyecto intelectual inconcluso.
Y su laxitud de hecho proviene del carácter abierto de su programa de
investigación, el cual “abre” preguntas más que “cerrar” temas. Esto también
está dado por el hecho de que la mayor parte de las obras de Marx son
reflexiones no finalizadas y no publicadas (él mismos se refiere al hecho de
que sus obras completas primero debieran ser escritas antes de ser publicadas
solo un par de años antes de su muerte)
El debate de los modos de producción
debe en último análisis siempre referirse al Prefacio
El mismo hecho de que bajo los modos
precapitalistas no se encuentre vigente la ley del valor, hace que éstos “no
puedan ser comprendidos completamente en términos de la extracción de un excedente
cuantitativamente específico”
Esta
es una nueva crítica a la cuestión de la vigencia de la ley del valor en modos
precapitalistas articulados con el mpc. Al respecto, podemos señalar algunas
cuestiones: a) debe incluirse el punto acerca de las formas de explotación; b)
la contribución cuantitativa de estas formas a la generación de valor se
expresa en la producción de mercancías que entran en el mercado capitalista y
que en alguna medida modifican el establecimiento del trabajo social medio
(aunque para el caso de la PMS de Bartra, esto no sucede); c) implican la ley
del valor en tanto modifican el mismo núcleo estructural en su temporalidad y
ritmo; d) implican la ley del valor en tanto reproducen fuerza de trabajo de
manera diferencial (fragmentación clase trabajadora) y coadyuvan a afirmar una
tasa de explotación más favorable a los patrones
“En un grado
considerable, Marx mismo se apartó de la alta teoría y de los grandes niveles
de abstracción cuando efectivamente trató de elucidar desarrollos históricos
específicos”. Esto es claro en Las luchas de clases en Francia y en su
actividad periodística. Esto, unido al sorprendente giro de Lenin, que
en un mes dio cuenta de toda la discusión acerca del campesinado ruso después
de la toma del poder (ya nos referimos a este hecho), nos informa que “el modo
de producción es mucho menos determinado en este contexto de lo que Foster
Carter, dejando de lado a otros, parecieran esperar. No existe una particular política que se seguiría necesariamente de la
característica general de la producción técnica o social, de una sociedad. Esta
es una conclusión inevitable de cualquier intento serio de explicar por qué
ciertas regiones africanas desarrollan estados y otras no; por qué las
relaciones entre los hombres las mujeres y la tierra varían grandemente en las
sociedades agrarias; o por qué los alineamiento de clase son tan frecuentemente
desemejantes en las sociedades capitalistas en una coyuntura histórica
particular”
Retener
este desarrollo. Sin embargo, sería pertinente no caer tampoco en el contingencialismo.
Una solución es pensar que la política de coyuntura es una que a la vez “crea”
realidad en un contexto en el cual lo real se mueve con actores que responden
de forma semi-consciente. El análisis de los modos de producción sentaría las
bases para establecer un contexto estructural en el cual se pueden negar con
certeza ciertos caminos, a la vez que se afirma la posibilidad de algunos otros caminos …
“Lo que se
necesita, no es un rechazo, sin embargo, de todo el marco del modo de
producción, el cual de hecho hizo emerger cuestiones mayores e inspiró una
investigación importante. Es un marco que opera a un nivel de abstracción que
proporciona una aplicabilidad específica muy pequeña cuando se lo hace caber en
un problema empírico. Cuando exprimida demasiado firmemente, la noción
valorable de articulación se reduce a otro término descriptivo y circular….Sin
embargo, la esencia de la estructura de Marx retiene un gran poder cuando
buscamos considerar el barrido más amplio de la historia de la
humanidad…Considerando la sociedad desde la perspectiva de los modos de
producción, no somos dejados con reglas prescriptivas que determinan la cultura,
la consciencia o la estrategia política sino con un amplio sentido de lo
posible, de los amplios límites dentro de una época histórica en la cual el hombre
puede hacer su propia historia…”
(Discusiones
y reflexiones)
Pareciera
que el autor reproduce el contingencialismo que Meiksins Wood le critica a la
distinción althusseriana entre formación social y modo de producción. De hecho,
el autor desliga la teoría de los modos de producción de la práctica, y en este
sentido imposibilita la comprensión de que la misma habilita la generación de
categorías concretas (categorías intermedias de Meiksins Wood). Este tipo de
categorías deben ser compatibles con las implicancias del concepto-totalidad,
pero a la vez conjuntarse de manera fértil con la historia efectiva. No deben
ser categorías adhoc, pero tampoco una derivación mecánica sin vinculación con
el desarrollo histórico. En este sentido, el concepto-totalidad debe ser uno
abierto, el cual permita la generación de categorías intermedias a partir de la
investigación histórica (éste es el sentido de un concepto que es desarrollo histórico y no una unidad autocontenida
de la cual se derivan idealmente consecuencias necesarias ineluctables). El
concepto-totalidad de modo de producción epocal está definido homogéneamente
por el hecho de poseer ciertas leyes de movimiento y una reproducción ampliada
relativa (expansión). Ahora, lo pertinente es preguntarse si sólo el mpc posee
un núcleo estructural y momentos en tanto que formas de explotación, o si ésta
es una característica pertinente a cada modo epocal
2. La persecución de lo real: modos de producción e historia
(Dennis Cordell)
Modo de producción compuesto de:
Fuerzas productivas: dotación de
recursos y tecnología
Relaciones sociales de producción: la manera en
que las fuerzas productivas están organizadas, el poder distribuido
Retener
definición rrpp y ffpp
El autor da cuenta de interpretaciones
del modo de producción más amplias; sin embargo, él se queda con su definición estrecha
y denomina superestructura a lo político e ideológico
“…naturaleza del
concepto. ¿Refleja la realidad un modo de producción? Si es así, ¿qué realidad
o qué aspecto de la realidad? Si primariamente económica, ¿cómo se relaciona
esta realidad a las realidades políticas, sociales y culturales? De otro lado,
si un modo de producción no es más que un modelo, entonces la tercera cuestión
de la aplicación deviene relevante. ¿Cómo puede un modelo –una imagen
generalizada de lo real- ser utilizado para interpretar las montañas de
datos…?”
“Mientras investigaciones teoréticas
focalizadas han contribuido a nuestro entendimiento de las formaciones sociales
africanas, me parece que ningún constructo analítico único reflejará la
realidad”
“Una
sociedad nunca se encuentra caracterizada por un único modo de producción…e
incluso si este fuera el caso base económicas similares pueden exhibir una
variación infinita (palabras de Marx) en las formaciones sociales de las que
dan cuenta”
“Articulación, me parece, es central
para el uso del concepto de modo de producción. Es el punto de entrada para la
historia en su sentido más empírico. Mientras el término formación social se
refiere a la multitud de relaciones sociales de producción dentro de una
sociedad, el término articulación enfatiza su contacto y articulación. Enfatiza
el cambio”
“El concepto de
modo de producción por sí mismo es incompleto sin un análisis del modo de
reproducción”
“El factor
determinante en la historia es, en último análisis, la producción y
reproducción de la vida inmediata…Por una parte, la producción de los medios de
subsistencia, de alimento, vivienda y herramientas; por otra, la producción de
los seres humanos mismos, la producción de la especie” (Engels)
“Se sigue, por
tanto, que la atención debe dirigirse a lo que Marx denomina la reproducción de
la masa de la fuerza de trabajo… Tal reproducción adquiere distintas
formas. El mantenimiento diario de la fuerza de trabajo, o la reproducción de
la fuerza de trabajo; la reproducción social del trabajo mediante la
procreación; y la reproducción social del trabajo mediante la inmigración desde
otras formaciones sociales”
“…modos de producción particulares
pueden muy bien dar lugar a patrones particulares de reproducción. Más allá de
esto, existen probablemente patrones clasistas específicos de conducta
reproductiva”
Esta
es una cuestión a pensar. Van Zanden trabaja esta idea de los diferentes
patrones de reproducción de la fuerza de trabajo que habilita un mismo modo de
producción. Quizás habría que pensar acerca de cuándo una forma de reproducir
la fuerza de trabajo es totalmente internalizada bajo el núcleo del mpc
(familia burguesa); cuando es internalizada con ciertas contradicciones que
modifican la operación de la ley del
valor (sin eliminarla, ya que ésta se mantiene vigente –lo que cambia es el
ritmo y temporalidad-como en el caso de los Estados de bienestar); cuando
relaciona formas de explotación distintas (y establecer las mismas diferencias
entre la reproducción de la fuerza de trabajo en zonas tipo el Languedoc de
Vilar y zonas tipo los casos constatados por Van Zanden en Holanda); cuando
vincula modos precapitalistas epocales; etc
En
suma, aún si el autor está cercano del nominalismo weberiano, sus preguntas son
válidas en tanto busca lo que Meiksins Wood denomina “categorías intermedias”
3. “No articularás los modos de producción” (Gervase Clarence Smith)
Se postulan tres tesis centrales
a)
Los
modos de producción deben ser retenidos sólo como modelos que llevan a
preguntarse y problematizar
b)
Nunca
deben articularse los modos de producción
c)
La
realidad social africana debe analizarse en términos de la multiplicidad de
relaciones de producción
“Los modos de
producción no existen. Como Hindess y Hirst mostraron, la manera más fértil de
interpretar el uso confuso del término por Marx es tratando los modos de
producción como modelos, abstracciones, instrumentos heurísticos, tipos ideales
–llámenlos como quieran, hasta tanto no sugieran que ellos existen “ahí
fuera”-. La confusión entre modelo y realidad ha sido uno de los principales
problemas con el uso de los modos de producción en los estudios africanos”
Citar
esta frase como un caso extremo de nominalismo y como negación amarxista de
nuestra propuesta
“El propósito de un modelo es aislar
unas pocas variables centrales y demostrar la conexión lógica y jerárquica
entre ellas. Crean un nuevo modo de
producción cada vez que elementos menores emergen en la superficie de la
realidad social y divergen del modelo es destruir el valor heurístico de todo
el ejercicio”
Ver
como el nominalismo del autor le lleva a criticar el a veces fértil taxonomismo
que propone Meillasoux y que aplica Hechter
“(Articulación de modos de producción)
Pero me parece que cualquier intento de combinar las lógicas de diferentes
modelos es un tipo de contradicción en los términos formal, la cual sólo puede
producir confusión. En tanto que modelo, cada modo de
producción es por naturaleza intemporal, incambiante y suficiente por sí mismo.
No es sin razón que las frustraciones en la articulación de modos de
producción han ido mano a mano con las frustraciones en la teorización de la
transición de un modo de producción a otro. En la raíz de todo este
esfuerzo malgastado se encuentra el mismo error fundamental, la creencia de que
los modos de producción efectivamente existen en las sociedades para ser
articulados y transformados”
Este
es un nuevo ejemplo de nominalismo extremo. Justamente nuestra propuesta
cuestiona el hecho de que los modos de producción sean intemporales,
incambiantes y autocontenidos: sorprende como son justo estas tres dimensiones
las que intentamos incluir en nuestra propuesta. Citar el ejemplo como un
programa de investigación “en negativo”
La utilidad de
un buen modelo es que produce buenas preguntas
Esto
puede ser retenido si cambiamos la palabra modelo por concepto
“…para información que no es producida
dentro del marco de un conjunto de preguntas ordenado. Esto en cambio provee un
canal para que lo real pueda re-entrar en lo racional, sugiriendo maneras para
mejorar los constructos teóricos”
La tesis de la primacía de las
relaciones de producción, en combinación con la crítica al etapismo y mezclado
todo esto con el leninismo, produjo un tipo de marxismo de alguna manera
caricaturesco, el cual buscaba la transición socialista en regiones social,
técnica, política y culturalmente muy atrasadas.
Retener
contexto (la crítica es de alguna manera justa)
Preguntas relacionadas a la rsp
a)
¿Quién
controla (no es propietario) de los medios de producción y cómo?
b)
Si
son controlados privadamente por un grupo restringido, ¿qué derechos de acceso
tiene la mayoría de la población y como retribución de qué tipo de pago?
c)
¿El
plusvalor extraído es redistribuido o retenido parcial o totalmente por el
grupo restringido?
d)
Si
es retenido, cómo es realizado, ¿invertido, utilizado en consumo conspicuo, en
actividades de relajo, o en el mantenimiento de aparatos de represión política
e ideológica?
e)
La
cuestión de la subsunción formal o real del trabajo
Retener
las preguntas para el debate acerca de las rsp/ffpp
“Y sin embargo, Hindess y Hirst
mostraron claramente que la esclavitud a un nivel es solamente un fenómeno
ideológico y político, la reducción de las personas al estatus de cosas. Un modo de producción esclavista, como modelo,
está basado en la extracción de fuerza de trabajo completamente a partir de
esas personas reificadas. Parece claro que pocas sociedades en el África,
si es que alguna, se aproximaron a tal modelo. Más todavía, la condición
jurídica de los esclavos africanos exhibió un confuso conjunto de variaciones,
infinitamente más complicado que la directa ecuación persona-cosa del modelo.
Aún así, las instituciones sociales que tendían hacia el modelo esclavista cumplieron
un rol crucial en muchas sociedades africanas…Es mucho más útil buscar
relaciones de producción que incorporan elementos de la esclavitud que debatir
infinitamente sobre si el modo de producción esclavista existió o no”
Es
una buena precisión. Lo importante es entender que estamos trabajando al
nivel de la unidad de producción, al
nivel de relaciones de explotación. El siguiente es observar si de un conjunto
de unidades homogéneas es posible y necesario derivar leyes de movimiento…
“Para
el periodo colonial, alejarse del enfoque de la articulación, permite una
análisis mucho más satisfactorio del sistema de trabajo migrante, el problema
histórico mismo que los teóricos de la articulación declaraban haber resuelto
más exitosamente. No existe ninguna necesidad de buscar la dominación de una
totalidad capitalista de estructuras económicas, políticas e ideológicas sobre
una totalidad de estructuras no-capitalistas. Es mucho más simple y más
iluminador decir que los trabajadores migrantes se encontraban involucrados
tanto en relaciones de producción capitalistas y no capitalistas. Entonces
deviene esencial detallar la compleja mezcla en la cual se insertaban los
migrantes, y su tarea para proveer cierto tipo de significado ideológico
general de esta mezcla. Esto es especialmente importante para restaurar la
agencia de los trabajadores, su habilidad para determinar en algún grado la
naturaleza de su mundo, antes que ser la expresión funcional de una estructura.
En esta luz, el trabajo migrante comienza a aparecer como una suerte de pacto
entre el capitalismo colonial y las sociedades africanas rurales, antes que la
brutal imposición de un estado omnipotente que sirve ciegamente al modo
capitalista de producción”
Mientras
el autor anterior precisamente argumentaba que la noción de articulación era
capaz de incluir la dinámica y una concreción intermedia al concepto de modo de
producción, el autor de este artículo precisamente argumenta lo contrario: la
noción de articulación cerraría el debate. Por nuestra parte, si tomamos el
concepto de modo de producción como uno cuyo mismo análisis debe ser hecho (por
lo cual distinguimos modos de producción secundarios, primarios, epocales,
formas de explotación, etc), entonces la noción de articulación abre la posibilidad
de generación de tipos de categorías intermedias. Es un concepto abierto que es
capaz de autotematizarse a sí mismo (articulación como coexistencia, como
convergencias, como contradicción, etc). Los peligros del concepto articulación
sólo están cuando se lo trata como unidad explicativa última irreductible (por
lo demás, lo mismo sucede con el concepto de modo de producción)
En muchas ocasiones, en el contexto
africano, el trabajo asalariado formal, era el camino dorado no a la
proletarización sino al estatus de kulak.
Esto
puede ser cierto para casos particulares. Si lo generalizamos caemos en lo que
Meiksins Wood le critica a Przeworski (elaborar una teoría a partir de casos
especiales). Con respecto al trabajo asalariado nuclear clásico, su característica
es la continua desposesión del productor directo de los medios de producción.
Si generalizamos la posición del autor, caemos en el mito de que todo
trabajador puede devenir capitalista si ahora lo suficiente. Por lo demás, esta
tesis cae en los errores de Wallerstein
La idea de que la articulación de modos
de producción supone el acceso a trabajo barato ha olvidado la otra cara de
esta cuestión: el trabajo que el mpc conseguía era muy poco productivo (el
autor menciona a África como una de las zonas en las cuales, tomando todo en
cuenta, el trabajo era caro para el capital)
No hay comentarios:
Publicar un comentario